Cuando uno asume la dirección de una familia lo hace para toda la vida, y bajo este precepto se manejan las dirigencias sindicales, sobre todo cuando llegan a la secretaría general.
El poder sindical se basa en los pilares de la “personería gremial”, la cual le permite la firma de convenios colectivos de trabajo y la perpetuidad en el cargo y “la ley de Obras Sociales”, el cual le brinda el acceso a una caja con enormes sumas de dinero que aportan regularmente los afiliados.
Casualmente la mayoría de los prestadores de esos servicios suelen ser familiares y/o amigos de los dirigentes.
Esto no cobraría relevancia si no se hubiera descubierto el fraude del sindicato de La Bancaria, que lamentablemente se vio manchado por los episodios vinculados con medicamentos apócrifos o con principios activos nulo, sumado al pequeño detalle del cobro de prestaciones que nunca se brindaron.
Todo esto derivo en que Zanola, Secretario general de La Bancaria, quede imputado como “presunto” jefe de una asociación ilícita. Pero por suerte no está solo, junto a él cayó su esposa.
Esta una historia que salpica muy de cerca a Moyano, pero a esta altura… ¿Qué le hace una marcha más al tigre?
Esta una historia que salpica muy de cerca a Moyano, pero a esta altura… ¿Qué le hace una marcha más al tigre?
Como es costumbre dentro de los gremios de la CGT… ¡Todo queda en familia!
